Mi relato es muy particular, ya que lo que comenzó como una orgia gang bang termino de una manera muy inesperada.
De mi puedo decirles que soy un persona tranquila en ese momento
tenia 32 años, complexión normal no gordo no flaco piel blanca lampiño
no soy un míster pero tampoco asusto. Dentro de mis contactos tengo uno
muy morboso le va la onda de la sumisión a veces cuando iba a visitarlo
me recibía solo con un suspensorio y un collar de perro puesto había
mucho morbo (detalles que puedo relatarles en otro momento)
Un día mi amigo sumiso quería experimentar un gang bang (ser el
único pasivo de varios machos activos) nos invito a varios, nos pusimos
de acuerdo quedamos de reunirnos en cierta estación del metro los
activos, llegamos tres habíamos chateado pero era la primera vez que nos
veíamos en persona había uno en especial que me llamo mucho la atención
cuarentón con una barba de candado que le daba una apariencia de
sadicon pecho velludo, el otro uno mas o menos de la misma edad moreno
musculoso alto, luego de unos minutos paso el pasivo sumiso en su carro
nos montamos y nos llevo a su apartamento el entro se puso su
suspensorio y los otros tres comenzamos a desnudarnos en la sala nos
veíamos conversábamos pero el convenio era que entre nosotros no íbamos a
hacernos nada todas las atenciones iban a ser para el pasivo.
Comenzó a mamarnos uno a uno le metíamos mano le abríamos el culo
le dábamos nalgadas apretábamos sus pezones en un momento dado el sumiso
tenia las manos esposadas en su espalda y los ojos vendados durante
mucho rato estuvimos cogiéndolo uno a uno lo poníamos a mamar en uno de
los cambios coloco al pasivo boca arriba en la orilla de la cama y lo
clave en ese momento mientras estaba dandole siendo como alguien me
abraza como me besaba los hombros siento el pecho velludo del sadicon en
mi espalda eso casi me hace acabar y me sali ya que no quería venirme
aun, decidimos descansar un rato, el pasivo fue al baño a reponerse un
poco ya que la paliza había sido larga nos sentamos en la sala con unos
tragos para relajarnos un rato en lo que el pasivo salió del baño vino
el musculoso y lo puso en cuatro en la cama yo me quede con el otro
viendo desde el sofá el espectáculo.
Mientras nos acariciábamos masturbábamos cuando me di cuenta nos
estábamos besando como un par de enamorados metíamos mano pero de forma
romántica tierna como si nos conociéramos de mucho tiempo como si
supiéramos lo que deseábamos en un momento dado olvidamos a los otros
dos y al oído me dice “quiero que me cojas, dale antes de que me
arrepienta” sin movernos mucho puse sus piernas en mis hombros coloque
full saliva en su culito y lentamente fui haciéndolo mío mirándolo a los
ojos dándonos muchos besos. No nos dimos cuenta cuando los otros dos
detuvieron su faena y vinieron a ver el espectáculo. En un momento dado
le hice saber que ya me iba a venir y el me dijo “acaba adentro, quiero
tu leche” fue uno de los orgasmos mas intensos que he tenido. Quería
ayudarlo a que el también se viniera comencé a hacerle sexo oral como a
la media hora era yo el que estaba sintiendo como ese machete estaba
rozando la entrada de mi culito desesperándome y pidiéndole a ese macho
que entrara en mi de una vez, a pesar de no ser dado a dejarme penetrar
deje que ese hombre me pusiera como quiso y me dio hasta que acabo. La
jornada se extendió hasta que se acabo la bebida ya era tarde en la
noche, nos vestimos y retiramos.
Al final puedo decirles que ese hombre velludo con barbita de
sadicon a los meses luego de salir de conocernos se convirtió en el amor
de mi vida, a los dos años ya estábamos viviendo juntos no tengo como
agradecerle a ese pasivo sumiso que lo presento y me di cuenta que las
cosas llegan en el lugar y el momento mas inesperado.
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